Periodistas y clubs denunciaron al Barça
La FIFA subraya la ejemplaridad del castigo por el caso Masia | Blatter irá a la reelección y el club no posee elementos para confiar en un posible indulto | El Barça mantiene a siete de los menores y espera el texto del TAS para poder regularizar a tres
Los residentes de La Masia del Barça situada en la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí Alex Caparrós
La FIFA exhibe la dura sanción que ha aplicado al Barça como si fuera un trofeo de caza mayor, un aviso para recordar quién manda en el fútbol y una prueba de la eficacia del Transfert Market System
(TMS), el sistema de control de traspasos que implantó hace cuatro años
y que afecta también a los futbolistas menores de edad. Aunque sin
previa delación, y puesto que la Federació Catalana había inscrito en
sus competiciones a los diez menores de la Masia que carecían de los requisitos necesarios, no se hubiera producido el problema.
Mark Goddard, director general del TMS en la FIFA, no quiso identificar ayer al o los denunciantes. "No lo voy a contar porque eso haría más difícil nuestro trabajo de investigación", afirmó, aunque apuntó algunas pistas: "Recibimos información de diferentes partes involucradas. De periodistas, por ejemplo, o de otras entidades futbolísticas". La junta directiva del Barcelona, que al comienzo del proceso manejó algunas sospechas, tampoco ha podido arrancar de la FIFA la autoría de la denuncia anónima que originó la investigación sobre uno de los menores extranjeros de la Masia y concluyó con la sanción de permanecer sin fichar jugadores -para ninguna categoría del club- hasta enero del año 2016.
"Es un caso particularmente importante para nosotros", afirmó Mark Goddard. "Demuestra que las reglas son las mismas para todos", añadió, subrayando la ejemplaridad de la sanción. El ejecutivo de la FIFA recordó que la única infracción es que los jóvenes afectados no figuraban en el módulo específico destinado a menores del TMS. "La cuestión es: ¿de dónde vienen esos jugadores que no están registrados?", se preguntó.
El procedimiento que rige la solicitud de la primera inscripción y la transferencia internacional de menores de edad exige la incorporación de numerosos documentos sobre el jugador y sus padres. Deben certificar sus identidades, sus permisos y contratos de trabajo, sus lugares de residencia, la formación académica, entre otros, y aportar documentación sobre el alojamiento y el cuidado del menor. Cabe recordar que la FIFA veta el traspaso internacional de menores de 18 años (menores de 16 entre países de la UE), con una excepción que es la más utilizada para esquivar la normativa: " Si los padres del jugador cambian su domicilio al país donde el nuevo club tiene su sede por razones no relacionadas con el fútbol".
El Barça mantiene a siete de los jugadores que dieron origen a la sanción de la FIFA y está a la espera de recibir los fundamentos de derecho de la resolución del TAS, que refrendó el castigo, que podrían dar opción a la regularización a corto plazo de tres de estos futbolistas. Ninguno de ellos puede disputar partidos de competición oficial. "Si intentan regularizarlos, el tiempo que llevaría dependería de cada caso concreto, de la documentación requerida. No podría dar un plazo", explicó Goddard en Zurich.
La actitud de los responsables de la FIFA -el secretario general de esta organización, Jérôme Walcke, tuvo un encuentro el lunes en Zurich durante la gala del Balón de Oro con el responsable de relaciones institucionales del Barça, Albert Soler- aleja la confianza en un posible indulto. Además Joseph Blatter, presidente de la FIFA desde 1998, tiene previsto aspirar a la reelección en los comicios que se celebrarán el 29 de mayo: "Lo importante es aceptar las decisiones con respeto, porque en el fútbol se aprende a ganar, pero también se aprende a perder", avisó el lunes.
Mark Goddard, director general del TMS en la FIFA, no quiso identificar ayer al o los denunciantes. "No lo voy a contar porque eso haría más difícil nuestro trabajo de investigación", afirmó, aunque apuntó algunas pistas: "Recibimos información de diferentes partes involucradas. De periodistas, por ejemplo, o de otras entidades futbolísticas". La junta directiva del Barcelona, que al comienzo del proceso manejó algunas sospechas, tampoco ha podido arrancar de la FIFA la autoría de la denuncia anónima que originó la investigación sobre uno de los menores extranjeros de la Masia y concluyó con la sanción de permanecer sin fichar jugadores -para ninguna categoría del club- hasta enero del año 2016.
"Es un caso particularmente importante para nosotros", afirmó Mark Goddard. "Demuestra que las reglas son las mismas para todos", añadió, subrayando la ejemplaridad de la sanción. El ejecutivo de la FIFA recordó que la única infracción es que los jóvenes afectados no figuraban en el módulo específico destinado a menores del TMS. "La cuestión es: ¿de dónde vienen esos jugadores que no están registrados?", se preguntó.
El procedimiento que rige la solicitud de la primera inscripción y la transferencia internacional de menores de edad exige la incorporación de numerosos documentos sobre el jugador y sus padres. Deben certificar sus identidades, sus permisos y contratos de trabajo, sus lugares de residencia, la formación académica, entre otros, y aportar documentación sobre el alojamiento y el cuidado del menor. Cabe recordar que la FIFA veta el traspaso internacional de menores de 18 años (menores de 16 entre países de la UE), con una excepción que es la más utilizada para esquivar la normativa: " Si los padres del jugador cambian su domicilio al país donde el nuevo club tiene su sede por razones no relacionadas con el fútbol".
El Barça mantiene a siete de los jugadores que dieron origen a la sanción de la FIFA y está a la espera de recibir los fundamentos de derecho de la resolución del TAS, que refrendó el castigo, que podrían dar opción a la regularización a corto plazo de tres de estos futbolistas. Ninguno de ellos puede disputar partidos de competición oficial. "Si intentan regularizarlos, el tiempo que llevaría dependería de cada caso concreto, de la documentación requerida. No podría dar un plazo", explicó Goddard en Zurich.
La actitud de los responsables de la FIFA -el secretario general de esta organización, Jérôme Walcke, tuvo un encuentro el lunes en Zurich durante la gala del Balón de Oro con el responsable de relaciones institucionales del Barça, Albert Soler- aleja la confianza en un posible indulto. Además Joseph Blatter, presidente de la FIFA desde 1998, tiene previsto aspirar a la reelección en los comicios que se celebrarán el 29 de mayo: "Lo importante es aceptar las decisiones con respeto, porque en el fútbol se aprende a ganar, pero también se aprende a perder", avisó el lunes.
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